LA AYUDA SE BUSCA,
SE LLAMA Y SE PIDE
SE AYUDA HASTA DONDE LAS CIRCUNSTANCIAS LO PERMITEN
AMAR ES RESPETAR
EL DESTINO DEL OTRO
"Deléitate asimismo en el Señor, Y él te concederá las peticiones de tu corazón.
Encomienda al Señor tu
camino, Y confía en él; y él hará. […]
Acecha el impío al justo, y
procura matarlo. El Señor no lo dejará en sus manos […]
Pero la salvación de los
justos es el Señor y él es su fortaleza en el tiempo de la angustia.
El Señor los ayudará y los librará; los
libertará de los impíos, y los salvará, por cuanto en él esperaron." (Salmos
37,4-5.32-33a.39-40)
"No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué
beberemos, o qué vestiremos? (…) vuestro Padre celestial sabe que tenéis
necesidad de todas estas cosas. Mas buscad primeramente el reino de Dios y
su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas". (Mateo
6,31.32b-33)
"Y yo os digo: Pedid,
y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá.
Porque todo aquél que pide, recibe; y el
que busca, halla; y al que llama, se le abrirá.
¿Qué padre de
vosotros, si su hijo le pide pan, le dará una piedra?
¿o si pescado, en lugar
de pescado, le dará una serpiente?
¿O si le pide un huevo, le dará un escorpión?" (Lucas 11,9ss)