martes, 6 de noviembre de 2018

Los sentimientos de Jesús y el banquete de bodas


Martes, 6 de noviembre de 2018

Primera lectura

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Filipenses (2,5-11):

Tened entre vosotros los sentimientos propios de Cristo Jesús (Humildad y sencillez). Él, a pesar de su condición divina, no hizo alarde de su categoría de Dios; al contrario, se despojó de su rango y tomó la condición de esclavo, pasando por uno de tantos. Y así, actuando como un hombre cualquiera, se rebajó hasta someterse incluso a la muerte, y una muerte de cruz. Por eso Dios lo levantó sobre todo y le concedió el «Nombre sobre todo nombre»; de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra, en el abismo, y toda lengua proclame: Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre.

Palabra de Dios

Salmo
Sal 21,26b-27.28-30a.31-32

R/. El Señor es mi alabanza en la gran asamblea

Cumpliré mis votos delante de sus fieles.
Los desvalidos comerán hasta saciarse,
alabarán al Señor los que lo buscan:
viva su corazón por siempre. 
R/. El Señor es mi alabanza en la gran asamblea

Lo recordarán y volverán al Señor
hasta de los confines del orbe;
en su presencia se postrarán
las familias de los pueblos. 
R/. El Señor es mi alabanza en la gran asamblea

Porque del Señor es el reino,
el gobierna a los pueblos.
Ante él se postrarán las cenizas de la tumba. 
R/. El Señor es mi alabanza en la gran asamblea

Mi descendencia le servirá,
hablarán del Señor a la generación futura,
contarán su justicia al pueblo que ha de nacer:
todo lo que hizo el Señor. 
R/. El Señor es mi alabanza en la gran asamblea

Evangelio

Lectura del santo evangelio según san Lucas (14,15-24):

En aquel tiempo, uno de los comensales dijo a Jesús: «¡Dichoso el que coma en el banquete del reino de Dios!»

Jesús le contestó: «Un hombre daba un gran banquete y convidó a mucha gente; a la hora del banquete mandó un criado a avisar a los convidados: "Venid, que ya está preparado." Pero ellos se excusaron uno tras otro. El primero le dijo: "He comprado un campo y tengo que ir a verlo. Dispénsame, por favor." Otro dijo: "He comprado cinco yuntas de bueyes y voy a probarlas. Dispénsame, por favor." Otro dijo: "Me acabo de casar y, naturalmente, no puedo ir." El criado volvió a contárselo al amo. Entonces el dueño de casa, indignado, le dijo al criado: "Sal corriendo a las plazas y calles de la ciudad y tráete a los pobres, a los lisiados, a los ciegos y a los cojos." El criado dijo: "Señor, se ha hecho lo que mandaste, y todavía queda sitio." Entonces el amo le dijo: "Sal por los caminos y senderos e insísteles hasta que entren y se me llene la casa." Y os digo que ninguno de aquellos convidados probará mi banquete.»

Palabra del Señor 

lunes, 8 de octubre de 2018

El amor pleno y santo...



Primera lectura
Lectura del libro del Génesis (2,18-24):

El Señor Dios se dijo: «No está bien que el hombre esté solo; voy a hacerle alguien como él que le ayude.» 

Entonces el Señor Dios modeló de arcilla todas las bestias del campo y todos los pájaros del cielo y se los presentó al hombre, para ver qué nombre les ponía. 

Y cada ser vivo llevaría el nombre que el hombre le pusiera. Así, el hombre puso nombre a todos los animales domésticos, a los pájaros del cielo y a las bestias del campo; pero no encontraba ninguno como él que lo ayudase. 

Entonces el Señor Dios dejó caer sobre el hombre un letargo, y el hombre se durmió. Le sacó una costilla y le cerró el sitio con carne. Y el Señor Dios trabajó la costilla que le había sacado al hombre, haciendo una mujer, y se la presentó al hombre.

El hombre dijo: «Ésta sí que es hueso de mis huesos y carne de mi carne! Su nombre será Mujer, porque ha salido del hombre. Por eso abandonará el hombre a su padre y a su madre, se unirá a su mujer y serán los dos una sola carne.»

Palabra de Dios

Salmo
Sal 127,1-2.3.4-5.6

R/. Que el Señor nos bendiga todos los días de nuestra vida

Dichoso el que teme al Señor
y sigue sus caminos.
Comerás del fruto de tu trabajo,
serás dichoso, te irá bien.
R/. Que el Señor nos bendiga todos los días de nuestra vida

Tu mujer, como parra fecunda,
en medio de tu casa;
tus hijos, como renuevos de olivo,
alrededor de tu mesa. 
R/. Que el Señor nos bendiga todos los días de nuestra vida

Ésta es la bendición del hombre que teme al Señor.
Que el Señor te bendiga desde Sión,
que veas la prosperidad de Jerusalén
todos los días de tu vida. 
R/. Que el Señor nos bendiga todos los días de nuestra vida

Que veas a los hijos de tus hijos.
¡Paz a Israel! 
R/. Que el Señor nos bendiga todos los días de nuestra vida

Segunda lectura

Lectura de la carta a los Hebreos (2,9-11):

Al que Dios había hecho un poco inferior a los ángeles, a Jesús, lo vemos ahora coronado de gloria y honor por su pasión y muerte. Así, por la gracia de Dios, ha padecido la muerte para bien de todos. Dios, para quien y por quien existe todo, juzgó conveniente, para llevar a una multitud de hijos a la gloria, perfeccionar y consagrar con sufrimientos al gula de su salvación. El santificador y los santificados proceden todos del mismo. Por eso no se avengüenza de llamarlos hermanos. 

Palabra de Dios

Evangelio

Lectura del santo evangelio según san Marcos (10,2-16):

En aquel tiempo, se acercaron unos fariseos y le preguntaron a Jesús, para ponerlo a prueba: 

«¿Le es lícito a un hombre divorciarse de su mujer?»

Él les replicó: «¿Qué os ha mandado Moisés?»

Contestaron: «Moisés Permitió divorciarse, dándole a la mujer un acta de repudio.»

Jesús les dijo: «Por vuestra terquedad dejó escrito Moisés este precepto. 

Al principio de la creación Dios "los creó hombre y mujer. Por eso abandonará el hombre a su padre y a su madre, se unirá a su mujer, y serán los dos una sola carne." De modo que ya no son dos, sino una sola carne. Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre.»

En casa, los discípulos volvieron a preguntarle sobre lo mismo. Él les dijo: «Si uno se divorcia de su mujer y se casa con otra, comete adulterio contra la primera. Y si ella se divorcia de su marido y se casa con otro, comete adulterio.»

Le acercaban niños para que los tocara, pero los discípulos les regañaban. Al verlo, Jesús se enfadó y les dijo: «Dejad que los niños se acerquen a mí: no se lo impidáis; de los que son como ellos es el reino de Dios. Os aseguro que el que no acepte el reino de Dios como un niño, no entrará en él.» Y los abrazaba y los bendecía imponiéndoles las manos.

Palabra del Señor

viernes, 5 de octubre de 2018

2 de octubre día de los Santos Ángeles Custodios



Martes, 2 de octubre de 2018

Primera lectura
Lectura del libro del Éxodo (23,20-23):

He aquí que yo voy a enviar un ángel delante de ti, para que te guarde en el camino y te conduzca al lugar que te tengo preparado. Pórtate bien en su presencia y escucha su voz; no le seas rebelde, que no perdonará vuestras transgresiones, pues en él está mi Nombre. Si escuchas atentamente su voz y haces todo lo que yo diga, tus enemigos serán mis enemigos y tus adversarios mis adversarios. Mi ángel caminará delante de ti y te introducirá en el país de los amorreos, de los hititas, de los perizitas, de los cananeos, de los jivitas y de los jebuseos; y yo los exterminaré. 

Palabra de Dios

Salmo Sal 90

R/. Ha dado órdenes a sus ángeles para que te guarden en sus caminos

Tú que habitas al amparo del Altísimo, que vives a la sombra del Omnipotente, di al Señor: «Refugio mío, alcázar mío,
Dios mío, confío en ti.» 
R/. Ha dado órdenes a sus ángeles para que te guarden en sus caminos

El te librará de la red del cazador, de la peste funesta.
Te cubrirá con sus plumas, bajo sus alas te refugiarás,
su brazo es escudo y armadura. 
R/. Ha dado órdenes a sus ángeles para que te guarden en sus caminos

No temerás el espanto nocturno, ni la flecha que vuela de día,
ni la peste que se desliza en las tinieblas, ni la epidemia que devasta a mediodía.
R/. Ha dado órdenes a sus ángeles para que te guarden en sus caminos

No se te acercará la desgracia, ni la plaga llegará hasta tu tienda, porque a sus ángeles ha dado órdenes
para que te guarden en sus caminos.
R/. Ha dado órdenes a sus ángeles para que te guarden en sus caminos

Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Mateo (18,1-5.10):

En aquel tiempo, se acercaron los discípulos a Jesús y le preguntaron: «¿Quién es el más importante en el Reino de los Cielos?»
Él llamó a un niño, lo puso en medio, y dijo: «Os digo que, si no volvéis a ser como niños, no entraréis en el Reino de los Cielos. Por lo tanto, el que se haga pequeño como este niño ése es el más grande en el Reino de los Cielos. El que acoge a un niño como éste en mi nombre, me acoge a mí. Cuidado con despreciar a uno de estos pequeños, porque os digo que sus ángeles están viendo siempre en el cielo el rostro de mi Padre celestial.

Palabra del Señor

sábado, 29 de septiembre de 2018

29 de septiembre día de los Santos Arcángeles Miguel, Gabriel y Rafael



Primera lectura
Lectura de la profecía de Daniel (7,9-10.13-14):

Durante la visión, vi que colocaban unos tronos, y un anciano se sentó; su vestido era blanco como nieve, su cabellera como lana limpísima; su trono, llamas de fuego; sus ruedas, llamaradas. Un río impetuoso de fuego brotaba delante de él. Miles y miles le servían, millones estaban a sus órdenes. Comenzó la sesión y se abrieron los libros. Mientras miraba, en la visión nocturna vi venir en las nubes del cielo como un hijo de hombre, que se acercó al anciano y se presentó ante él. Le dieron poder real y dominio; todos los pueblos, naciones y lenguas lo respetarán. Su dominio es eterno y no pasa, su reino no tendrá fin.

Palabra de Dios

Salmo
Sal 137,1-2a.2b-3.4-5.7c-8

R/. Delante de los ángeles tañeré para ti, Señor

Te doy gracias, Señor, de todo corazón;
delante de los ángeles tañeré para ti,
me postraré hacia tu santuario. R/.

Daré gracias a tu nombre:
por tu misericordia y tu lealtad,
porque tu promesa supera a tu fama;
cuando te invoqué, me escuchaste,
acreciste el valor en mi alma. R/.

Que te den gracias, Señor, los reyes de la tierra,
al escuchar el oráculo de tu boca;
canten los caminos del Señor,
porque la gloria del Señor es grande. R/.

Apocalipsis 12 
La mujer y el dragón

1  Apareció en el cielo una gran señal: una mujer vestida del sol, con la luna debajo de sus pies, y sobre su cabeza una corona de doce estrellas.
2 Y estando encinta, clamaba con dolores de parto, en la angustia del alumbramiento.
3 También apareció otra señal en el cielo: he aquí un gran dragón escarlata, que tenía siete cabezas y diez cuernos, y en sus cabezas siete diademas;
4 y su cola arrastraba la tercera parte de las estrellas del cielo, y las arrojó sobre la tierra. Y el dragón se paró frente a la mujer que estaba para dar a luz, a fin de devorar a su hijo tan pronto como naciese.
5 Y ella dio a luz un hijo varón, que regirá con vara de hierro a todas las naciones; y su hijo fue arrebatado para Dios y para su trono.
6 Y la mujer huyó al desierto, donde tiene lugar preparado por Dios, para que allí la sustenten por mil doscientos sesenta días.
7 Después hubo una gran batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles luchaban contra el dragón; y luchaban el dragón y sus ángeles;
8 pero no prevalecieron, ni se halló ya lugar para ellos en el cielo.
9 Y fue lanzado fuera el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero; fue arrojado a la tierra, y sus ángeles fueron arrojados con él.
10 Entonces oí una gran voz en el cielo, que decía: Ahora ha venido la salvación, el poder, y el reino de nuestro Dios, y la autoridad de su Cristo; porque ha sido lanzado fuera el acusador de nuestros hermanos,el que los acusaba delante de nuestro Dios día y noche.
11 Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.
12 Por lo cual alegraos, cielos, y los que moráis en ellos. !!Ay de los moradores de la tierra y del mar! porque el diablo ha descendido a vosotros con gran ira, sabiendo que tiene poco tiempo.
13 Y cuando vio el dragón que había sido arrojado a la tierra, persiguió a la mujer que había dado a luz al hijo varón.
14 Y se le dieron a la mujer las dos alas de la gran águila, para que volase de delante de la serpiente al desierto, a su lugar, donde es sustentada por un tiempo, y tiempos, y la mitad de un tiempo.
15 Y la serpiente arrojó de su boca, tras la mujer, agua como un río, para que fuese arrastrada por el río.
16 Pero la tierra ayudó a la mujer, pues la tierra abrió su boca y tragó el río que el dragón había echado de su boca.
17 Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo.

Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Juan (1,47-51):
En aquel tiempo, vio Jesús que se acercaba Natanael y dijo de él: «Ahí tenéis a un israelita de verdad, en quien no hay engaño.»
Natanael le contesta: «¿De qué me conoces?»
Jesús le responde: «Antes de que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi.»
Natanael respondió: «Rabí, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel.»
Jesús le contestó: «¿Por haberte dicho que te vi debajo de la higuera, crees? Has de ver cosas mayores.» Y le añadió: «Yo os aseguro: veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre.»

Palabra del Señor

viernes, 20 de julio de 2018

La carta de Novak Djokovic... explicación de Cuando soy débil, entonces soy fuerte.

Novak Djokovic
"Querida familia y amigos, deseo compartir, con todos vosotros, cómo me sentí en el camino de ganar Wimbledon 2018. Antes que nada, permítanme comenzar escribiendo que la sensación de tener a mi hijo en brazos de mi esposa en la ceremonia de premios, en mi box, fue la sensación más maravillosa que he tenido en cualquier torneo que haya ganado en mi carrera.

Cuando me convertí en padre, uno de mis mayores sueños era tener a mis hijos presentes en las gradas mientras jugaba. Por no hablar de ganar trofeos. Ese sueño se hizo realidad hace varios días. Todos siguen pidiéndome que describa el sentimiento. He dicho que es inolvidable, especial, gratificante, maravilloso y alegre.

Pero, sobre todo, ¡es mágico! Cuando pensé que ese momento no podía mejorar, gritó "¡Papá, papá!". Fue entonces cuando me emocioné por completo. Estoy muy AGRADECIDO de haber experimentado eso. He imaginado y rezado para que un día ganara un trofeo de Grand Slam delante de mi hijo. Afortunadamente para mí, Tara está creciendo y no puedo esperar a que ella me vea hacer lo mismo que hice enfrente de Stefan.

El tenis era todo para mí hasta que me convertí en padre y esposo. 

Todo lo que hice estuvo dirigido al éxito del tenis. Cuando me convertí en padre y esposo, mi "mundo" evolucionó. No cambió, se convirtió en algo más hermoso. Por supuesto, se suman más responsabilidades, pero al final del día, se abre una nueva dimensión de amor y energía dentro de ti que nunca sabría que existía. El regalo más grande que recibes de Dios es la mayor sensación de empatía, compasión y devoción hacia tus hijos. Pero no todo está claro una vez que te conviertes en padre; se necesita aprendizaje para alcanzar ese "equilibrio de oro" en la vida que todos buscan.

Para mí fue el equilibrio entre el tenis, las prioridades y la familia. Mi esposa fue tan servicial y solidaria desde que dio a luz a Stefan y Tara. Siempre se tomaba el tiempo para hablar de lo que fuera que me molestaba y para ayudarme a encontrar la manera de sentir que estoy dando lo mejor de mí en casa con los niños y ella y en la cancha de tenis.

La lesión fue uno de los problemas, el otro gran motivo fue cualquier motivación. No tuve problemas para practicar y disfrutar de la cancha de tenis, pero tenía obstáculos mentales cuando tenía que competir.

Siempre he respetado a las personas que comparten sus momentos más vulnerables como puntos de inflexión en la búsqueda de la verdadera fuerza que inspira a tanta gente. Fui vulnerable tantas veces en los últimos años, y todavía soy vulnerable. No me da vergüenza. Por el contrario, me hace más fiel a mí mismo y a los demás. Me permite acercarme a las personas. Me permite "profundizar" y analizar lo que realmente está sucediendo dentro de mí. Cuando descubro eso, puedo crear una estrategia para superar este problema y avanzar como un ser humano más fuerte, más sabio y más feliz.

Durante los últimos 2 años, no fui paciente con mis expectativas de tenis. No fui prudente en estrategias. Y ciertamente no estaba oyendo claramente mi cuerpo diciéndome que algo serio pasaba con mi codo. Estaba tratando de encontrar soluciones en otro lado y el problema siempre estaba dentro de mí.

Después de muchos cambios realizados con entrenamiento, raqueta, miembros del equipo, no sabía si podría volver al nivel deseado de tenis. En realidad, una parte de mí siempre creyó en mis propias cualidades y capacidades, pero hubo muchos momentos dudosos en los que el curso de acción podría haber sido diferente. 

Afortunadamente, tuve la ayuda de todas las fuerzas divinas que me guiaron en la dirección correcta. Dirección que es buena para mí, que me traerá paz y equilibrio.

Me gustaría extender mi mayor aprecio, respeto y amor a todas las personas que han creído en mí y me han ayudado a ganar otro trofeo de Wimbledon. Los amo, amo el tenis y me encanta la vida.

Posdata: el césped de Wimbledon tenía un gran sabor una vez más. Solo agregaría un poco de aguacate y sería perfecto.


Segunda carta del apóstol San Pablo 

a los Corintios 12, 1-10


Hermanos: Toca presumir. Ya sé que no está bien, pero paso a las visiones y revelaciones del Señor. Yo sé de un cristiano que hace catorce años fue arrebatado hasta el tercer cielo, con el cuerpo o sin cuerpo, ¿qué sé yo?, Dios lo sabe. Lo cierto es que ese hombre fue arrebatado al paraíso y oyó palabras arcanas, que un hombre no es capaz de repetir. De uno como ese podría presumir; lo que es yo, solo presumiré de mis debilidades. Y eso que, si quisiera presumir, no diría disparates, diría la pura verdad; pero lo dejo, para que se hagan una idea de mí solo por lo que ven y oyen. Por la grandeza de estas revelaciones, para que no tenga soberbia, me han metido una espina en la carne: un ángel de Satanás que me apalea, para que no sea soberbio. Tres veces he pedido al Señor verme libre de él; y me ha respondido: «Te basta mi gracia; la fuerza se realiza en la debilidad». Por eso, muy a gusto presumo de mis debilidades, porque así residirá en mí la fuerza de Cristo. Por eso, vivo contento en medio de mis debilidades, de los insultos, las privaciones, las persecuciones y las dificultades sufridas por Cristo. Porque, cuando soy débil, entonces soy fuerte. 

viernes, 8 de junio de 2018

El Sagrado Corazón de Jesús: el corazón que siempre ama...

Sagrado Corazón de Jesús
en vos confío...

PRIMERA LECTURA

Mi corazón está perturbado
Lectura de la profecía de Oseas 11, 1. 3-4. 8c-9

Esto dice el Señor:

«Cuando Israel era joven lo amé y de Egipto llamé a mi hijo.
Era yo quien había criado a Efraín, tomándolo en mis brazos; y no reconocieron que yo lo cuidaba.
Con lazos humanos los atraje con vínculos de amor.
Fui para ellos como quien alza un niño hasta sus mejillas.
Me incliné hacia él para dale de comer.
Mi corazón está perturbado, se conmueven mis entrañas.
No actuaré al ardor de mi cólera, no volveré a destruir a Efraín, porque yo soy Dios, y no hombre; santo en medio de vosotros, y no me dejo levar por la ira».
Palabra de Dios

Is 12, 2-3. 4bcd. 5-6
R. Sacaréis aguas con gozo de las fuentes de la salvación.

«Él es mi Dios y Salvador: 
confiaré y no temeré, 
porque mi fuerza y mi poder es el Señor, 
él fue mi salvación». 
Y sacaréis aguas con gozo 
de las fuentes de la salvación. R.
«Dad gracias al Señor, 
invocad su nombre, 
contad a los pueblos sus hazañas, 
proclamad que su nombre es excelso». R.
Tañed para el Señor, 
que hizo proezas, 
anunciadlas a toda la tierra; 
gritad jubilosos, habitantes de Sión: 
«Qué grande es en medio de ti el santo de Israel». R.

SEGUNDA LECTURA
Comprendiendo el amor de Cristo, que trasciende todo conocimiento
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios 3, 8-12. 14-19

Hermanos:

A mí, el más insignificante de todos los santos, se me ha dado la gracia de anunciar a los gentiles la riqueza insondable de Cristo, e iluminar la realización del misterio, escondido desde el principio de los siglos en Dios, creador de todo.
Así, mediante la Iglesia, los principados y potestades celestes conocen ahora la multiforme sabiduría de Dios, según el designio eterno, realizado en Cristo, Señor nuestro, por quien tenemos libre y confiado acceso a Dios por la fe en él.
Por eso doblo las rodillas ante el Padre, de quien toma nombre toda paternidad en el cielo y en la tierra, pidiéndole que os conceda, según la riqueza de su gloria, ser robustecidos por medio de su Espíritu en vuestro hombre interior; que Cristo habite por la fe en vuestros corazones; que el amor sea vuestra raíz y vuestro cimiento; de modo que así, con todos los santos, logréis abarcar lo ancho, lo largo, lo alto y lo profundo, comprendiendo el amor de Cristo, que trasciende todo conocimiento.
Así llegaréis a vuestra plenitud, según la plenitud total de Dios.
Palabra de Dios

Aleluya Mt 11, 29ab
R. Aleluya, aleluya, aleluya
Tomad mi yugo sobre vosotros – dice el Señor -, 
y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón. R.

EVANGELIO
Le traspasó el costado, y salió sangre y agua

Lectura del santo Evangelio según san Juan 19, 31-37

Los judíos, como era el día de la Preparación, para que no se quedaran los cuerpos en la cruz el sábado, porque aquel sábado era un día grande, pidieron a Pilato que les quebraran las piernas y que los quitaran.
Fueron los soldados, le quebraron las piernas al primero y luego al otro que habían crucificado con él; pero al llegar a Jesús, viendo que ya había muerto, no le quebraron las piernas, sino que uno de los soldados, con la lanza, le traspasó el costado, y al punto salió sangre y agua.
El que lo vio da testimonio, y su testimonio es verdadero, y él sabe que dice verdad, para que también vosotros creáis.
Esto ocurrió para que se cumpliera la Escritura: «No le quebrarán un hueso»; y en otro lugar la Escritura dice: «Mirarán al que traspasaron»
Palabra del Señor

sábado, 13 de enero de 2018

Oración de sellamiento con la Sangre de Cristo

+Por la señal de la Santa Cruz,
de nuestros enemigos, 
líbranos Señor Dios nuestro,
en el nombre del Padre, del Hijo
y del Espíritu Santo.
Amén.

Dios mío ven en mi auxilio,
Señor, date prisa en socorrerme.

Invoco la poderosa protección
de la Preciosísima Sangre redentora de Cristo,
Rey del universo y Rey de reyes.

En el nombre de Dios Padre,
en nombre de Dios Hijo
y en el nombre de Dios Espíritu Santo:
con el Poder de la Sangre de Jesucristo el Señor,
sello y protejo, protejo y sello,
mi consciente, inconsciente, subconsciente,
mi razón, mi corazón, mis sentimientos,
mis sentidos, mi ser físico, mi ser mental,
mi ser material y mi ser espiritual.

Dios mío ven en mi auxilio,
Señor, date prisa en socorrerme.

Todo lo que soy, todo lo que tengo,
todo lo que puedo,
todo lo que sé y todo lo que amo,
queda sellado y protegido
con el poder de la Sangre de Jesucristo el Señor.

Dios mío ven en mi auxilio,
Señor, date prisa en socorrerme.

Sello mi pasado, mi presente y mi futuro,
sello mis planes, metas, sueños, ilusiones,
todo lo que emprenda, todo lo que inicie,
todo lo que piense y haga,
queda bien sellado y protegido
con el poder de la Sangre de Jesucristo el Señor.

Dios mío ven en mi auxilio,
Señor, date prisa en socorrerme.

Sello mi persona, mi familia, mis posesiones,
mi casa, mi trabajo, mi negocio,
mi árbol genealógico,
lo de antes y lo de después,
todo queda sellado y protegido,
con el Poder de la Sangre de Jesucristo el Señor.

Dios mío ven en mi auxilio,
Señor, date prisa en socorrerme.

Me escondo en la llaga del 
Costado herido de Jesús,
me escondo en el Corazón Inmaculado
de la Santísima Virgen María,
para que nada ni nadie me pueda afectar
con sus maldades, sus malas palabras y obras,
con sus malos deseos ni con sus engaños,
para que nadie me pueda dañar
en mi vida afectiva, en mi economía, en mi salud,
con sus males enviados, con sus envidias,
con sus malos ojos, habladurías y calumnias,
ni con magias, hechizos, conjuros o maleficios.

Dios mío ven en mi auxilio,
Señor, date prisa en socorrerme.

Todo mi ser queda sellado,
todo a mi alrededor queda sellado,
y yo ....... quedo para siempre protegido
con la Preciosísima Sangre de nuestro Redentor.

Amén, amén, amén.

Rezar el Credo, Padrenuestro, Avemaría y Gloria.
Mientras se hace la oración y los rezos
es conveniente tener una vela blanca encendida,
después se deja hasta que se consuma.